Aprendí a leer los labios
sin escuchar
y te perdí
Ahora nada
me acompaño
la vida es un pasillo interminable
reconozco, sí
es mejor que una sala de espera
todo es mejor
cuando lanzás la carnada
te olvidas de la pesca
y te concentras en el timón
mejor aún
cuando te desprendes del timón
y te relajas en el agua
lo mismo podés hacer en la montaña
en pleno asfalto
en el piso 3
me da igual
que no sea igual
el lugar sigue siendo el mismo
esta vasija que nos contiene
la única receta
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